viernes, 30 de julio de 2010

Una noche/en un cuarto con ruido



- Te ofrezco empezar de nuevo, tu y yo, de nuevo ( mientras salíamos de un cuarto a otro, nuestras manos estaban muy unidas, pero a la vez me dabas la espalda, íbamos a escapar de todo y empezar algo distinto, mientras más avanzábamos a la salida nuestras manos perdían la fuerza y se debilitaban, cuando me detuve paraste... nuestras manos se escaparon y volvieron cada una a su lugar, nos miramos pero no fueron necesarias las palabras, el pasado se había ido hace mucho tiempo atrás y la realidad lo había alcanzado todo... solo vi cuando la puerta de la entrada se cerraba lentamente, lo que quedaba era la ausencia y las lágrimas en el suelo.


- Yo llegué al café, estuve esperando. Me tomé un jugo mientras escuchaba las conversaciones de las otras mesas como solíamos hacerlo, lloré cuando entré al baño, nunca había llorado en un lugar público, una desconocida me sostuvo mientras lloraba, me pesaban las piernas... No podía sentir mis piernas, estuve dos semanas en cama, primero inventé que era un resfrío, después una sinusitis, al final una neumonía.



- ¿Por qué viniste?
- Porque te quería ver.
- ¿Y qué esperabas encontrar?


(
una segunda oportunidad)